El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) reclutó, entrenó y pagó a jóvenes sicarios a través de la plataforma de Facebook durante mucho tiempo y la empresa de Marck Zuckerberg tuvo una respuesta muy laxa, de acuerdo con un reportaje del Wall Street Journal.


El CJNG es una de las de las organizaciones criminales más poderosas del mundo y tal vez el cártel de la droga más importante de México, en la actualidad. Está lidereada por Nemesio Oseguera, alias ‘El Mencho’ y en sus 11 años de existencia se ha convertido en uno de los cárteles líderes en el trasiego de cocaína, heroína, drogas sintéticas, marihuana e incluso ha incursionado en el tráfico ilegal de hidrocarburos, desplazando a otros cárteles históricos y muy poderosos en el camino.


Una gran parte del éxito de la organización criminal, se debe al masivo reclutamiento de jóvenes sicarios por distintos medios, uno de ellos Facebook. De manera muy evidente, el uso que los criminales le dieron a la plataforma, no solamente para reclutar, sino también para pagar a los sicarios, violó todas las reglas de Facebook. Sin embargo, la compañía no impidió que el cártel publicara su contenido en Facebook o Instagram, de acuerdo con documentos internos analizados por el Wall Street Journal.


El diario estadounidense detalló cómo los empleados dedicados a la moderación de contenido de Facebook denunciaron distintos casos de violación en los términos de uso. Por ejemplo, cuando los traficantes de personas en Medio Oriente usaron la plataforma para atraer a mujeres con ofertas de trabajo para ser tratadas, finalmente, como esclavas sexuales. La misión de estos trabajadores es denunciar también casos de tráfico de armamento, delitos de odio, venta ilegal de órganos, pornografía, entre otras cosas.


Y, el protocolo marcado por la propia empresa es que se eliminen las páginas que publican contenido cuyo objetivo sea la práctica de este tipo de delitos. No obstante, a pesar de que se tenía conocimiento de estas prácticas, las páginas siguieron activas en Facebook e Instagram.


De acuerdo con la investigación realizada por los periodistas Justin Scheck, Newley Purnell y Jeff Horwitz, en uno de los informes internos de Facebook, un ex-policía que se convirtió en trabajador de esta área de la compañía advierte que él y su equipo detectaron una red del Cártel Jalisco Nueva Generación al examinar las publicaciones que hacían, así como mensajes privados entre los miembros.


El equipo identificó a personas clave, rastreó pagos que se hicieron a los sicarios y descubrió cómo reclutaban a los adolescentes pobres para que asistieran a campos de entrenamiento para convertirse en sicarios. Entre los mensajes, descubrieron que los reclutadores advertían seriamente que, de ser contratados, podían ser golpeados brutalmente o asesinados si intentaban abandonar el campo de entrenamiento. Además, había publicaciones de abierta apología a la violencia, con armas chapadas en oro y todo firmado con las siglas CJNG.


Todo esto pasaba a pesar de que, previamente, la empresa había etiquetado internamente al cártel dentro de las ‘Personas y organizaciones peligrosas’; algo que significaba que las páginas deberían haber sido eliminadas automáticamente de la plataforma, por violar las políticas de Facebook.


Al ver esta falla, el expolicía en cuestión recomendó mejorar este mecanismo y garantizar que se apliquen las propias prohibiciones de Facebook. Sin embargo, la compañía dirigida por Mark Zuckerberg, de acuerdo con los documentos, eliminó contenido vinculado al CJNG, pero no totalmente ni efectiva. Y esto sucedió así debido a que el equipo designado a esta tarea no realizó un seguimiento adecuado de las recomendaciones.


Según los informes, en varios países Facebook cuenta con pocos o ningún empleado que hable la lengua local y que, en este sentido, sea capaz de identificar los usos criminales de la plataforma.


Además, de las 3.2 millones de horas que pasaron los empleados dedicados al monitoreo y etiquetado de este tipo de contenido, solamente 13% se dedicaron a estudiar el contenido de cuentas fuera de Estados Unidos. Esto a pesar de que más del 90% de los usuarios mensuales de la compañía se encuentran fuera de EU y Canadá.


Otras omisiones similares a la ocurrida con el CJNG fueron evidenciadas en los informes y ocurrieron en lugares ubicados en Medio Oriente o India, relacionados con trata de personas y explotación laboral y servidumbre doméstica.


Texto tomado del : WSJ y Expansión