Patricia Vázquez y Martín Hernández

Luego de permanecer más de tres años en prisión preventiva, debido al proceso que enfrenta por tortura y protección a redes de trata infantil, el ex gobernador de Puebla Mario Marín Torres recibió de la jueza segunda de distrito en Quintana Roo, Angélica del Carmen Ortuño Suárez, el beneficio de prisión domiciliaria, aseguró Aracely Andrade, abogada de la periodista Lydia Cacho.

Entrevistada al término de una audiencia virtual realizada desde Cancún, en la que, dijo, la juzgadora decidió el cambio de medida cautelar, Andrade anticipó que tras este fallo el ex mandatario será excarcelado en las próximas horas del penal de Almoloya de Juárez, donde se encuentra, y trasladado a su casa en Puebla.

Detalló que Ortuño Suárez impuso a Marín Torres una fianza de 100 mil pesos; además de que tiene prohibido salir de la ciudad y del país, así como acercarse o comunicarse con los otros personajes indiciados por el mismo proceso; le retuvieron su visa y pasaporte, tendrá vigilancia en su domicilio particular de Puebla y se le colocará un brazalete electrónico para localizarlo.

La abogada añadió que su clienta no está conforme con el fallo, ya que el ex mandatario, tiene el dinero, el poder y las influencias para evadirse de la justicia, por lo que presentará el próximo miércoles un recurso de apelación.

Por su parte, alrededor del mediodía, Lydia Cacho, la autora del libro Los demonios del edén: el poder que protege a la pornografía infantil, publicó en la red social X: En este momento estamos en audiencia, la jueza Angélica del Carmen Ortuño Suárez nos ha dicho que va a liberar a Mario Marín, que no amerita prisión preventiva por sus delitos.

La comunicadora detalló que el ex mandatario no ha sido exonerado; sin embargo, es un preso peligroso para mí, para mis testigos y mi familia, y agregó que lo liberan justo en la recta final en la que esperábamos firme por tortura. Así el poder del ex gobernador de Puebla dentro del Poder Judicial.

Anoche afuera del penal del Altiplano no había ningún movimiento fuera de lo común, ni seguridad extra; fuentes extraoficiales señalaron que en caso de que el acusado salga será en un periodo de 24 a 72 horas, pues se le tendría que hacer un chequeo médico y colocarle el brazalete electrónico.

El ex gobernador de Puebla fue detenido en febrero de 2021 en Acapulco, Guerrero, y llevado a Cancún, donde quedó sujeto a proceso como probable autor intelectual de la tortura en agravio de la periodista, Lydia Cacho, detenida en diciembre de 2005 por judiciales poblanos en esa ciudad y llevada vía terrestre a Puebla.

Publicado originalmente en: https://www.jornada.com.mx/2024/08/11/politica/006n1pol