San Judas Tadeo, también conocido como Judas de Santiago, es uno de los santos más venerados en México. Su nombre se distingue de Judas Iscariote, el traidor de Jesús, y su devoción aumentó por su conexión con causas difíciles y desesperadas.
Según los evangelios de Mateo, Marcos y Lucas, fue uno de los doce apóstoles de Jesús, y es tradicionalmente reconocido como el autor de la epístola de Judas en el Nuevo Testamento.
Nacido en Cana, Galilea, Judas Tadeo era primo de Jesús según la costumbre judía. Después de la resurrección de Cristo, San Judas Tadeo predicó en varias regiones, incluyendo Mesopotamia y Persia, donde fue martirizado.
En la iconografía, se le representa con un medallón de Jesús en el pecho, un símbolo de la leyenda donde lleva el rostro de Cristo al rey Abgar de Edesa, quien se curó de una enfermedad. A menudo aparece portando un garrote, símbolo de su martirio.
En México, San Judas Tadeo es el santo de las causas difíciles, por lo que muchos mexicanos devotos le confían problemas de salud, económicos o personales, buscando su intercesión en momentos críticos.
Esta devoción floreció en comunidades populares y entre quienes enfrentan desafíos diarios. El Templo de San Hipólito, en la Ciudad de México, es el epicentro de esta veneración, donde cada 28 de octubre, miles de fieles acuden en peregrinación con imágenes y ofrendas en agradecimiento por los favores concedidos.
El poder intercesor de San Judas Tadeo forma parte de los testimonios de muchos devotos que aseguran que recibieron curaciones milagrosas, solución a problemas financieros o personales, entre otras ayudas. La devoción a este santo refleja no solo la fe católica del pueblo mexicano, sino también su búsqueda de esperanza y consuelo en tiempos de dificultad.
Publicado originalmente en http://La Lista