#CulturaLight 2021
Por Manuel Alberto Santillana.
- Rodolfo Rascón en su texto sobre músicos sonorenses a lo largo del siglo XX señala que, desde 1900 en casi todos los pueblos serranos hubo orquestas de alientos[i]. De hecho, uno de los foxtrot mexicanos más conocidos “El Costeño” es composición de Silvestre Rodríguez, músico del centro del país, avecindado en Nacozari dese 1910. Es probable que en estas orquestas se encuentre el germen de músicos de jazz, e incluso que haya interpretado alguna rola de éste genero. Ya que su repertorio de polkas, valses, foxtrot o tangos proviene de las partituras que eran llevadas por el intercambio comercial con California.
- El desierto de Sonora comprende desde Guaymas hasta el sur de Utah. Múltiples acontecimientos ligados al Jazz y el blues acontecen aunque aislados, inconexos, surrealistas inclusive, pero parte de una historia. Charlie Mingus nace en 1922 en Nogales, Arizona, cuando ambos Nogales eran un mismo pueblo polvoso, vaquero y con poca vida comercial y todos se conocían. Cerca de 1930 Al Capone vive en Puerto Peñasco, entonces Rocky Point, y pone un casino con una orquesta de jazz traída desde Chicago, gracias a la política de prohibición alcohólica. En San Carlos Guaymas en esta misma década del siglo XXI hay un pianista neoyorquino de jazz, quien quiere seguir anónimo y retirado, y de repente acude a tocar a un bar atendido por una pareja de gringos retirados, y algunas noches ha acompañado un cine club donde pasan en ocasiones filmes mudos y él toca el piano recreando las escenas, todo por placer.
- En los sesentas y setentas dos o tres músicos sonorenses recuperan el Jazz, entonces en la ciudad de Hermosillo. El Kennedy –ahora avecindado en Peñasco-, Don y Rodolfo el Chino Medina intercambian experiencias de buen jazz con la tradición de la música de alientos. Tradición que de repente se continuará con la Banda de Música del Gobierno del Estado donde también reciben esta influencia. Y que durante muchos años el maestro Horacio Lagarda, hizo y hace que la banda de metales incluya percusiones afroantillanas y que su repertorio incluya desde la salsa hasta música de Arturo Márquez. Dos o tres músicos sonorenses formaron parte de bandas de Jazz en Guadalajara o la Ciudad de México; el Benson tocaba en Jalisco en un bar, Rubén Darío García fue baterista de un grupo del DF y regresó a pasar su vejez a Ciudad Obregón y Kiko de la Rosa igual pero a su Caborca, perla del desierto sonorense. Arnulfo Miranda hijo de músicos de los sesentas, es un versátil pianista, guitarrista y flautista quien desde hace veinte años ha incursionado en todos los géneros del Jazz, aquí en Hermosillo.
- Especial referencia requieren dos festivales de Jazz, uno que realizaba la Universidad de Sonora durante la década de los ochenta y el Festival de jazz de Puerto Peñasco. De 1982 hasta 1988 o 1990 la Universidad de Sonora patrocinó una semana del Jazz que se efectuaba todas las noches en el auditorio Emiliana de Zubeldía a reventar siempre. Mientras que el festival de Jazz de Puerto Peñasco (Rocky Point) estaba organizado por músicos y artistas de Arizona y California quienes iban a pasar unos tres o cuatro días de sol, mar, mariscos y cerveza en ese bello puerto. De ambos festivales queda, como de la rosa, sólo el nombre. Sin embargo apenas en este 2021 se realizó de nuevo, y con éxito por 3 días el festival de Jazz de PuertoPeñasco, con la inclusión de jóvenes grupos de Hermosillo.
- Mención aparte solicita un grupo de Blues de Ciudad Obregón, el Obregón Blues Band con Paco Ávila Madera como una de las cabezas, quienes desde hace 25 años son un puente de conexión con el jazz y el blues. En Hermosillo el grupo Stretto de Oscar Mayoral, músico Hermosillense-sudajacaliforniano, tiene los mismos 25 años de producción y creatividad. Ahora ya con su segunda generación de músicos incorporada. Actualmente Paloma Ledgar, el trompetista Cheché y el joven baterista el Chakalito, conforman un grupo de buen jazz beep bop. Y desde luego la incorporación al escenario regional del maestro del jazz Alejandro Corona, base del estudio del Jazz en la Universidad Veracruzana por décadas, son las caras vigentes.
- Conviene cerrar esta participación señalando la importancia de radio Universidad de Sonora que desde sus inicios en 1962 incluyó música de jazz. Con una extraordinaria discoteca de viniles programó siempre una barra de jazz y lo sigue haciendo, ahora audioteca digital. Actualmente además de los programas específicos existentes, Radio Universidad de Sonora y Radio Sonora son las dos únicas estaciones quines programan cotidianamente alrededor de 5 a 6 horas semanales de jazz en su programación. Y desde luego, el programa semanal Jazzday que produjo Manuel Alberto Santillana y se transmitió por Bigclickradio.com todos los lunes por la tarde, que fue una suerte de clase semanal de jazz clásico; y que este año se reiniciará precisamente por Libera Radio.
- Y la cereza del pastel, en mi opinión el mejor programa de jazz de todo México: “Caja de resonancia” que producen y conducen Edmundo Armenta y Rubén Pineda, dos profesionales diletantes y conocedores del buen Jazz quienes transmiten el top de la actualidad, lo más innovador y reciente del mundo del jazz.
[i] Rascón Valencia, Rodolfo: Compositores Sonorenses 1860-1940, Universidad de Sonora en 1992.
