Extraído del Border Hub. Por Melva Frutos.
Desde la perspectiva de Jesús Ibarra, en México abundan los periodistas con alto nivel de profesionalidad, lo que faltan son empresas y espacios que apuesten a apoyar investigaciones con toda la inversión que ello implica.
“Cada vez están menos dispuestos a sostener lo que una investigación demanda, a lo que los tiempos tan polarizados que tenemos imponen.
“Y escasean en realidad espacios, organismos u organizaciones que apuesten por impulsar el periodismo que atiende asuntos de interés público que apuesten por capacitar a los periodistas y que apuesten por una cultura de trabajo que permita entregar productos con un estándar de calidad consistente”, afirma el periodista de Hermosillo Sonora.
Dice que el buen periodismo requiere inversión en todo tipo de servicios logísticos, de producción, fotografía, videos y asesorías jurídicas, entre otras cosas, y contrario a eso, las empresas cada vez precarizan más la profesión.
Se requiere una red de apoyo
El comunicólogo por la Universidad de Sonora parte del hecho de que hoy en día las culturas de trabajo en los medios no se orientan a dar espacios para la capacitación y el análisis que sostengan la elaboración de trabajos con respaldo integral, como lo hace el Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte.
“Una red de apoyo y en sobre todo en este caso, una subvención o una beca para solventar los gastos de elaboración del periodismo de investigación.
“Porque hay que recalcarlo, en este sentido creo que Border Hub con apoyo de ICFJ está sentando un precedente muy importante en el norte y noroeste de México de que hacer buen periodismo, periodismo de calidad o periodismo que responde al interés público tiene costos, es costoso y la única manera de dar una condición de estabilidad para hacerlo es financiando, no al periodista, sino financiando a los proyectos de investigación periodística”.
Retorno al origen: periodismo
Tiene una maestría en Ciencias Sociales por el Colegio de Sonora y en proceso de un doctorado en la misma institución, sin embargo, como periodista no había tenido la oportunidad de realizar una investigación con un plan organizado como el que llevó con el Border Hub.
“Era como old school, vieja escuela. Regresar a lo que decía el librito, aprender de las experiencias de temas publicados previamente, sobre todo en prensa escrita y replicar etapas o pasos del proceso de investigación, pero nunca con, digamos, el aspecto estructurado de diseñar una matriz de investigación, plantear una hipótesis y responderla; elaborar un cronograma, elaborar un presupuesto o bien hacer pre reportero que se abone como carga de evidencia para los pasos que vas a dar más adelante”.
En su historial prevalecía la espontaneidad, la improvisación y dejar los trabajos que podrían ser de gran valor para cuando hubiera tiempo porque la propia dinámica de las redacciones le impedían priorizar.
En menos de dos años, Jesús Ibarra ha divulgado dos reportajes con el respaldo del Border Hub.
El 29 de abril de 2020 publicó “Por mil pesos, adultos mayores de Sonora facilitan sus datos biométricos”, mientras que el 28 de marzo pasado dio a conocer la investigación “Desviaron empresas “factureras” de Sonora más de 221 millones de pesos”, ambas con una beca de la organización fronteriza.
Ambos le significaron un reto, sin embargo, subraya que el proceso de elaboración del segundo trabajo tuvo un nivel particular de dificultad, pero también de enseñanza.
Investigando operaciones simuladas
En una de sus conferencias de prensa “mañaneras” el presidente Andrés Manuel López Obrador había revelado un listado nacional de decenas de miles de empresas factureras de operaciones simuladas (EFOS).
Ahí dio inicio el pre-reporteo de Jesús Ibarra haciéndose las preguntas ¿cuántas de esas empresas fueron abiertas en Sonora? ¿de qué año?, entre otras.
Había que focalizar el tema para su entidad. El listado era enorme y las empresas estaban ordenadas alfabéticamente complicando detectar las que pertenecían a Sonora, por lo que inició a un largo camino de indagación por medio de la Plataforma de Transparencia.
Las preguntas a la Unidad Financiera de la Fiscalía, en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y en el Servicio de Administración Tributaria (SAT) fueron directas.
Solicitó la información relacionada con su entidad y para dar peso puso como antecedente que el presidente lo había revelado, agregando los detalles del hecho. El SAT respondió “a cuenta gotas”.
“Entre 2014 y 2021 al menos 220 empresas simularon operaciones con municipios y el Gobierno de Sonora, provocando un daño a las finanzas públicas de 221.15 millones de pesos”, detalla el reportaje de Jesús Ibarra.
Pudo conocer los nombres de las empresas, mismas que facturaron en su mayoría servicios de organización de eventos, construcción, consultoría, entre otros.
“De los 221.15 millones de pesos identificados un total de 185 millones 421 mil 633 corresponde a transacciones efectuadas por los Ayuntamiento y 31 millones 279 mil 903 pesos fueron ejercidos vía adjudicaciones directas estatales y federales.
“También se identificó que 4 millones 413 mil 692 pesos fueron facturados a una red de ‘empresas fantasma’ que se conformó en Hermosillo”, agrega el texto.
Ayuda de algoritmos
Parte de los beneficios que el reportero encontró en el desarrollo del artículo fue la colaboración de Héctor Yeomans, un ingeniero en sistemas informáticos que se ha enfocado en apoyar a periodistas en temas de transparencia desarrollando algoritmos.
“Que nos permiten descargar o consultar en tiempo real grandes cantidades de datos referentes a temas de corrupción, de contratos o presupuestales, entre ellos, las empresas fantasmas.
“Entonces las condiciones se fueron dando poco a poco para articular esto, armarlo, poderlo publicar y tener un sustento jurídico, tener un sustento factual en datos y tener un sustento técnico con los algoritmos que esta persona, Héctor Yeomans nos facilitó en aquel momento”.
Hace 22 años piso por primera vez una redacción cuando llegó a hacer su servicio social al Periódico El Imparcial de Hermosillo. Cubría deportes, pero aprendió a hacer de todo, incluso edición, lo que le dio las bases de su carrera.
También trabajó en el Periódico Cambios, en el Expreso, y perteneció a Comunicación Social de la Universidad; todo ello combinándolo con su faceta de docente de la Universidad de Sonora y algunas universidades locales.
Las becas, un apoyo
Un reajuste de personal que lo dejó sin empleo en pleno inicio de la pandemia lo orilló a cuestionarse si seguir en la profesión o no.
“Me enfrenté a la disyuntiva de continuar o no continuar, retirarme, dedicarme otra cosa. Venía la pandemia, era muy complicado el panorama, no tenía más que las ganas de trabajar, los contactos del Border Hub, las clases en la universidad para salir adelante”.
Encontró el empuje para quedarse. Fue aceptado como becario para desarrollar su primer reportaje en el Border. Ingresó al Programa Adelante de la International Women’s Media Foundation. Aprendió a recuperarse.
“Estoy seguro que me he hecho más resiliente, he vivido un proceso de crecimiento profesional y personal muy importante, muy acelerado los últimos dos, tres años y es gracias al apoyo de organizaciones como Border Hub, ICFJ y como IWMF que apuestan por formar a periodistas y por impulsar el periodismo de investigación”.
Desde entonces es periodista independiente que presta distintos tipos de servicios y cubre diversas asignaciones para medios de comunicación, empresas, organizaciones civiles y universidades.
