Michoacán fue la entidad más peligrosa para defensores del medio ambiente en 2023: ocho activistas fueron asesinados en ese estado.
18 personas defensoras de la tierra y el medio ambiente fueron asesinadas en México durante 2023, de acuerdo al informe anual de la organización internacional Global Witness.
Al menos siete de estos asesinatos estuvieron relacionados con el activismo de las víctimas en contra de la actividad minera y el 70% de las personas asesinadas eran de origen indígena. Y aunque se registraron menos asesinatos que en 2022, año en que fueron asesinadas un total de 31 personas, México es el tercer país más letal para defensores del medio ambiente en el mundo.
Los nombres de los defensores asesinados son:
Abisaí Pérez Romero
Alejandro Ortiz Vázquez
Alfredo Cisneros Madrigal
Álvaro Arvizu Aguiñiga
Antonio Díaz Valencia
Cuauhtémoc Márquez Fernández
Eustacio Alcalá Díaz
Félix Vicente Cruz
Higinio Trinidad de la Cruz
Isaul Nemesio Zambrano
Jesús Toral García
Juan Medina
Lorenzo Froylán de la Cruz Ríos
Manuel Flores Reyes
Miguel Estrada Reyes
Ricardo Arturo Lagunes Gasca
Rolando Magno Zambrano
Román Flores Hernández
En el mundo, un total de 196 personas defensoras fueron asesinadas durante 2023. De estos, al menos un 83% se concentran en América Latina. Colombia es el país con mayor tasa de homicidios de personas defensoras con 79 asesinatos en 2023. Esta cifra representa el 40% de casos registrados en el mundo y el número más alto registrado para cualquier país desde que Global Witness comenzó su registro hace once años. Con 461 asesinatos de activistas ambientales desde 2012, Colombia es también el país con mayor número de asesinatos documentados.
A Colombia le sigue Brasil, con 25 casos en 2023. No obstante, en Brasil existe un drástico descenso de los 34 asesinatos que se registraron en 2022. Global Witness atribuye este descenso a las políticas públicas implementadas por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva quien ha intentado desactivar las decisiones ecocidas de su antecesor, Jair Bolsonaro, quien abrió la puerta para la explotación y destrucción masiva de la selva del Amazonas, así como la invasión ilegal de tierras indígenas y el menosprecio a las medidas para reducir emisiones de carbono.
México, por su parte, comparte el tercer lugar con Honduras que también registró 18 asesinatos de defensores ambientales; aunque la población de Honduras es mucho menor que la de México.
Global Witness ha registrado, en once años, un total de 2 mil 106 asesinatos de defensoras y defensores del medio ambiente en todo el mundo.
“El asesinato sigue siendo una estrategia habitual para silenciar a las personas defensoras y, sin lugar a duda, la más brutal” señala el informe. No es la única estrategia. La organización también destaca otros actos de violencia como la intimidación, las campañas de desprestigio, la criminalización y la desaparición forzada.
Michoacán: mineras y desaparición forzada
El informe destaca el caso de Ricardo Lagunes y Antonio Díaz: dos defensores que intentaban defender a la comunidad de San Miguel de Aquila, en Michoacán, de los efectos y abusos de la minera Ternium que explota yacimientos de acero en la zona. En enero de 2023, ambos defensores sufrieron desaparición forzada y, a la fecha, no se sabe nada de ninguno de los dos.
Global Witness señala que, en México, los ataques a defensores del medio ambiente se han concentrado sobre todo en las entidades de Jalisco, Colima y Michoacán: todos estados con costa hacia el Océano Pacífico. De estos tres, Michoacán fue el más peligroso con ocho asesinatos documentados en 2023.
San Miguel de Aquila es una comunidad rodeada de pinos y robles en cuyas montañas yacen toneladas de hierro bajo tierra. Actualmente, la comunidad es asediada por grupos del crimen organizado, concretamente el Cártel Jalisco Nueva Generación, quien suele acosar a los comuneros.
Ternium, por su parte, es uno de los productores de acero más poderosos del continente. Forma parte del Grupo Techint, que, en México, cuenta con contratos multimillonarios en el sector energético y una de las cuatro seleccionadas para construir, por ejemplo, la Refinería Dos Bocas en Tabasco.
En México y el mundo, Ternium acumula una larga lista de acusaciones: muertes de trabajadores por falta de medidas de seguridad, pago de sobornos millonarios a cambio de contratos, sin mencionar los daños ambientales.
En Michoacán, Ternium comenzó a operar en 2005. Desde entonces, la comunidad de Aquila se inconformó con su manera de operar y más de una vez la han señalado de mantener vínculos con el crimen organizad. Días antes de la desaparición de Ricardo Lagunes y Antonio Díaz, testigos han declarado que personal de la siderúrgica les amenazó públicamente.
“Y es que hay mucho en juego –dice el informe de Global Witness–. La producción de acero es inmensamente rentable, como demuestra el hecho de que, solo en 2023, reportó a la empresa minera unas ventas totales de 17.600 millones de dólares estadounidenses”.
Estos beneficios tienen un costo alto. No sólo la industria siderúrgica es responsable del 8% de las emisiones de carbono en el mundo, sino que la extracción de hierro y la fabricación de acero requiere de minas a cielo abierto, además del uso de cantidades exorbitantes de agua. Su impacto es irreversible.
Aquila es, además, una comunidad nahua. Del total de personas defensoras del medio ambiente y el territorio asesinadas en 2023 en el mundo, el 43% eran de origen indígena.
Antonio Díaz y el abogado Ricardo Lagunes intentaron durante años frenar la actividades de la minera o, al menos, obligarlos a cumplir los acuerdos y compromisos que en teoría buscaban beneficiar a la comunidad o aminorar su impacto ecológico.
“Defender los derechos humanos tuvo consecuencias graves para Antonio y Ricardo, así como para sus familiares y otros miembros de la comunidad que apoyaban su trabajo. Hombres armados los siguieron y amenazaron a lo largo de cuatro años”, dice el informe y destaca que, en 2022, Antonio envió una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador acusando a Ternium de financiar grupos armados para reprimir a la comunidad de Aquila.
Un mes después de esta carta fueron desaparecidos. El 15 de enero de 2023, encontraron su coche abandonado con las ruedas pinchadas en Colima, cerca de la frontera con Michoacán.
No son los primeros: diez años antes, en noviembre de 2014, tres representantes de la comunidad de Aquila fueron desaparecidos luego de presentar una denuncia contra Ternium ante las autoridades agrarias. Encontraron sus cuerpos meses después.
Meses después de la desaparición de Ricardo Lagunes y Antonio Díaz, desapareció también Eustacio Alcalá, un líder nahua de San Juan Huizontla, una comunidad vecina, quien también se oponía a las minas de Ternium. Apareció muerto a los dos días.
Entre diciembre de 2006 y agosto de 2023, 93 personas defensoras del medio ambiente han desaparecido en México.
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