El 19 de junio de 1957, en Tamaulipas, México, nacía Rafael Sebastián Guillén Vicente, más conocido como el Subcomandante Marcos, líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

Rafael se formó inicialmente en colegios Jesuitas de su ciudad natal, Egresó de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México y ejerció como profesor de la Universidad Autónoma Metropolitana de la Ciudad de México. Luego de una breve estadía en Barcelona regresó a México para disertar sobre el “Tratado de Libre Comercio” que el presidente Carlos Salinas de Gortari se aprestaba a firmar con los EEUU.

En un encendido discurso Rafael declaró que el pueblo mexicano se revelaría “con un grito atronador exigiendo justicia”. En 1992 se reunió con los movimientos indígenas de Chiapas que modificaron su pensamiento tradicional revolucionario del Che Guevara y Emiliano Zapata por uno más acorde a la realidad mexicana de los años ’90.

Rápidamente escaló posiciones en el ya existente EZLN, adoptó el nombre de “Marcos” de un compañero de armas y planeó la reaparición pública del movimiento para el 1 de enero de 1994, día en que entraba en vigencia el criticado “Tratado de libre comercio”.

Esa mañana, acompañado por un grupo radicalizado armado de campesinos del estado de Chiapas tomo las ciudades de Altamirano, Las Margaritas y Ocosingo, Oxchuc, Huixtán y Chanal y San Cristóbal de las casas, esta última fue la única que conservó tras la contraofensiva del ejército mexicano.

Desde ese momento se instauró un gobierno autárquico y paralelo apartado de la constitución nacional, regido por la “Declaración de la selva Lacandona” que instauraba una democracia participativa y anticapitalista, una real reforma agraria y demás estamentos de organización social como tribunales y policía.

Los siguientes gobiernos de Ernesto Zedillo y Vicente Fox intentaron pactar con Marcos, pero su posición intransigente no hacía posible un documento de entendimiento, pese a ello, Marcos accedió a un unilateral “alto el fuego”.

El EZLN fue abandonando las armas y pactando con algunos partidos nacionales de izquierda comenzó a tener representación política tradicional.

Lo que mejor define a un Marcos hoy apartado del escenario público, son sus propias palabras “Soy gay en San Francisco, negro en Sudáfrica, asiático en Europa, anarquista en España, palestino en Israel, judío en Alemania nazi… y zapatista en el sureste mexicano”.


Fuente: Efemérides Históricas