(Primera parte)

Por Jorge Tadeo Vargas

Armar una lista de “lo mejor del año” siempre será una decisión personal y que parte de los gustos de quien haga dicha lista; por lo tanto, estas son solo recomendaciones cercanas a los gustos de ciertos lectores (molestarse porque no se encuentra su disco favorito es por lo menos ocioso) y que, además, no intenta más que mostrar un poco de lo quien esto escribe escuchó -cuando se escribe sobre música- en el año. No se debe de tomar de otra forma, más como un ejercicio personal, subjetivo y sin otro afán que el entretenimiento.

Dicho esto, podemos comenzar. Aunque el Folk y el Country -en todas sus variantes- han estado siempre presentes en mis listas de reproducción, en los últimos años estos géneros son los que dominan con respecto a los otros que escucho -Punk/HC, Metal, Grunge…- y justo estos son los géneros a los que les dedico esta lista, en un año donde fueron de los más prolíficos con respecto a nuevos discos y es que tanto de Folk como de Country, principalmente el subgénero conocido como Alt Country, escuché alrededor de ciento treinta nuevos discos que fueron publicados en el 2023 y aquí me voy a dar a la tarea de elegir los veinte que más sonaron en mi reproductor o digamos, que es mi top veinte.

Habrá que decir que la idea de compartir esta lista, de hacer este ejercicio, es la de compartir con personas afines en gustos musicales o cabe la posibilidad de que alguien con la mente abierta descubra que por acá hay algunas bandas o músicos que les dicen algo y comiencen a explorar más allá de sus gustos habituales.

Solo recuerden que no existe la música buena o la música mala, solo existe aquella que te dice algo o que no te dice nada, lo demás es solo pretensión de los críticos y periodistas musicales tratando de encasillar todo como bueno o malo.

Disfruten este ejercicio, felices fiestas, salud, anarquía y café con pan para el festejo de fin de año.

20.-Miles Miller – Solid Gold: Miller es mejor conocido por ser el baterista de estudio y de giras que acompaña a la banda de Sturgill Simpson, así que es perfectamente razonable que cuando decidió sacar un disco como solista, una de las leyendas del Alt Country como lo es Simpson se lo produjera dando como resultado toda una sorpresa, especialmente para aquellos que no sabíamos que Miles Miller es un estupendo compositor, guitarrista y cantante.

Solid Gold es un disco donde el Country Alternativo es el género dominante, sin dejar de lado las demás influencias de Miller, así que es fácil escuchar Folk, Blues o ese Groove tan particular del sur de los Estados Unidos y que Pantera popularizó llevándolo al Metal. En cada canción se mantiene esta mezcla que convierte a cada canción en un espacio de tranquilidad e introspección, incluso en canciones como “My Sanity” que dejan claro esa parte de ser quienes somos intentando encajar.

Estamos ante un disco debut de un artista que lleva años preparándose para darnos un inicio muy prometedor en su trayectoria, especialmente ahora que Sturgill Simpson está cercano al retiro por decisión propia.

19.-Tommy Prine – This Far South: Aunque este disco salió mucho después de la muerte de John Prine, no deja de tener esa aura de que estuvo presente en todo el proceso, tanto de la composición, como de la grabación de cada una de las canciones, y es que haber crecido siendo hijo de alguien como él no es difícil imaginarlo acompañándolo en todo el proceso que llevó a Tommy a convertirse en un músico.

Con “Ships in the Harbor”, Tommy ya nos iba preparando para el talento de este joven con This Far South deja muy claro hacia dónde se dirige y el cómo en unos años estaremos hablando de él como una de las voces más importantes del Folk/Country Norteamericano a nivel internacional.

En cada una de las once canciones que componen este disco se nota la influencia de John Prine, pero no como algo incómodo, sino orgánico, simple sencillo, un diálogo entre padre e hijo, que le permite a este ir encontrando su propia voz, su estilo que a veces navega entre el Folk más clásico, otras con unos ligeros toques de Lo-Fi que nos recuerdan a Damien Jurado en sus inicios y muchas otras, ese Alt Country del cual su padre tuvo mucho que ver para su nacimiento. Qué decir de las letras que hacen un recorrido por el sentir, el desamor, el dolor en cada una de ellas.

Estamos sin duda ante un primer disco que nos augura una trayectoria bastante interesante por parte de Tommy Prine.

18.-Son Volt – Day of the Doug: A diferencia de Jeff Tweedy que aceptó sin problemas convertirse en uno de los referentes más respetados del Indie internacional con Wilco, que es sin duda una de las bandas más representativas del Alt Country en el mundo, Jay Farrar, decidió concentrarse en Son Volt y mantenerse en la escena lo más alejado de la industria posible, intentando rendirle un homenaje a lo hecho con los Uncle Tupelo y con este nuevo disco no desentonan en ese propósito y si bien no son canciones originales, el tratamiento que le dan, la forma de versionarlas, le da ese sello característico de Farrar y los Son Volt.

“Day of the Doug” es un homenaje a Doug Sahm, pionero del Tex-Mex con los Texas Tornado y varios discos solistas y quien murió demasiado pronto, por lo que Farrar decide seleccionar doce canciones de este músico para hacerle un tributo más que merecido a alguien con quien él tuvo la fortuna de colaborar en algún momento.

El sello de los Son Volt está en cada una de las doce canciones, pero eso no hace que se pierda la esencia de Sahm, al contrario, se rejuvenece, se refresca y nos invita a buscar más música de este cantante que lamentablemente no ha recibido el reconocimiento que se merece y espero que este sea un primer momento para que eso ocurra.

17.-Margo Price – Strays II: Reseñar este disco sin mencionar a Strays que salió en enero de este año podría parecer un sinsentido, pues no se entiende -o eso parece ser- uno sin el otro. Pero no es así. Aunque todas las canciones fueron compuestas en el mismo periodo, las que pertenecen a Stray II en su mayoría fueron escritas en colaboración con Jeremy Ivey, compañero de Margo y con esto tienen un sonido distinto, mucho más alejado del Country y acercándose a algo más.

Antes de hablar del disco, pienso que es conveniente decir que Margo Price es un referente de la música sureña en Nashville, la ciudad donde vive y esto no es solo por sus discos y conciertos, sino porque siempre está para apoyar a nuevos proyectos, ya sea ofreciéndoles espacios para tocar, produciendo sus discos e incluso regalándoles canciones de su autoría. En estos tiempos pensar en Nashville es pensar en Price.

Justo por esto es que esta segunda parte del disco Stray sale de la zona de confort de Price para darnos un gran disco donde el Rock Obrero de Bruce Springsteen, de Tom Petty, de Joan Jett se abren paso ante el Country dándonos un disco transgresor pensando en quien lo firma e interpreta pero no por eso es un mal disco, al contrario es un disco que con el paso del tiempo ira tomando mayor importancia, adelantado a su época y aceptado por lo que es: una declaración de principios de Margo Price que nos dice que cuando se trata de ella, siempre esperemos lo inesperado.

16.- Uncle Lucius – Like It’s the One Last: Después de un receso de cinco años en los que la leyenda de esta banda fue fortaleciéndose, estos tejanos están de regreso con un disco que no desmejora lo hecho en el 2012 con “Keep the Wolves Away”, al contrario, los mantienen en lo que ese disco los convirtió, en uno de los referentes actuales del Country Alternativo de esta década.

Cómo es su costumbre, este disco mantiene esa mezcla de Rock Sureño, Blues, Gospel y por supuesto mucho Country Clásico que nos dan como resultado el sonido característico de los Lucius que por si fuera poco sus letras se mantienen en esa línea cercana al sentir de la clase trabajadora y no por eso me refiero a que sean letras políticas, sino son letras que hablan del día a día, de lo que es llevar el pan a la mesa, del sufrimiento para hacerlo y eso las convierte en algo mucho más peligroso, es dejar claro que a pesar de todo ellos se mantienen al pie del cañón.

Uncle Lucius esperó hasta diciembre para sacar este disco, cuando la euforia por el Country Alternativo estaba tomando su curso, lo hacen como una estrategia de dejar claro que ellos como muchos otros referentes se mantienen vivos más allá de la industria.

15.-Sam Barber – Million Eyes: Barber forma parte de una generación que ha llegado al Country de forma fortuita. Son jóvenes que no vivieron en carne propia el sentir del sonido del sur y lo que significa,  antes de saber lo que era pasar los lunes al sol en un bar bebiendo cerveza sin futuro, ellos cantaron sobre eso, lo subieron a las redes sociales y consiguieron que muchos otros como ellos que veían a sus hermanos mayores en situaciones como las que cantaban esos músicos y lo entendían de segunda mano, es así como comienzan a posicionarse con la misma fórmula de muchos otros artistas Pop, es decir sencillos que suben a las redes sociales y cuando están listos sacan un EP, más que un disco completo.

Million Eyes es justo eso, un EP de siete canciones que ya eran populares en las redes mas la que le da el nombre el disco, que justo Barber la compuso para definir cómo se siente con los reflectores puestos en él y una industria interesado en comérselo.

Esto no hace que sea un disco malo o pensando en el mainstream, al contrario, Barber compuso un disco debut bastante bueno e interesante de Country Alternativo que nos dice que es apenas el comienzo de alguien que tienen mucho que dar, eso si sabe mantenerse lejos de la industria. Es un disco que mezcla de forma correcta el Folk, con el Country, renovando -aunque no se necesite- el sonido sureño para nuevas generaciones.

14.-Tyler Childers – Rustin’ in the Rain: Una lista de “lo mejor del año” sin un disco reciente de Tyler Childers estaría incompleta, aunque no sea el mejor disco que este cantante ha publicado en su carrera y es que este oriundo de los Apalaches, desde su disco debut a la fecha sigue mostrando que es uno de los tres referentes más importantes del Country Alternativo y como lo mostró en su disco del 2022, Can I Take My Hounds to Heaven? Y el experimento que llevó a cabo.

Si bien Childers pertenece a esa generación que llevo al Country Alternativo al sur de los Estados Unidos, sacándolo de los bares hipsters de los estados del centro, en este disco, se acerca más al Country Clásico con el que fue criado, por lo que se aventura a grabar una de sus canciones favoritas, que además es un clásico de este género: “Made in Through the Night” de Kris Kristoferson, canción que toca en cada concierto que da y que versionada por él y su banda Food Stamps le da otro significado.

Más allá de la polémica que causa el video de “In Your Love”, misma que desató muchísimos comentarios a favor y en contra a su alrededor, desde hace un par de disco previos es más que claro que Childers está pasando por un momento personal de reafirmación de sus ideas y esto es muy importante a rescatar si pensamos en lo que se viene en los próximos discos.

13.-Pony Bradshaw – North Georgia Rounder: Pony llega al Country Alternativo directamente desde las raíces y el folklore más profundo del sur de los Estados Unidos y lo hace como muy pocos artistas son capaces de hacerlo: mezclando los géneros más importantes de esta región con la valiosa tradición oral de contar historias, dándole la misma importancia a la música y a las letras, por lo que es un constructor de imágenes, un historiador y así en las nueve canciones de este disco hace un recorrido por el norte de su estado natal recuperando narrativas locales, vivencias personales de los pobladores que nos platican su forma de vida, además de invitarnos a la reflexión de si el sur es lo que nos han vendido o solo es esa idea que los intelectuales necesitan para su propia superioridad moral.

North Georgia Rounder funciona como un diario de viaje de Pony, al cual nos invita a hurgar, sin temor a lo que encontremos.

12.-Bella White – Amog the Things: El Segundo disco de esta canadiense que desde su debut ha mezclado sin empacho y de una forma bastante irreverente el Folk con el Bluegrass, que de cierta forma le ha permitido crear un sonido muy personal y característico, el cual termina de afianzar en este disco que si bien tiene algunos cambios, como por ejemplo fue compuesto en su totalidad en pandemia, por lo que el Folk suena mucho más que el Bluegrass o que el Banjo pierda protagonismo para dárselo a la Lap Steel, o que su voz suene mucho más introspectiva que desde esa triste alegría que le da el Bluegrass en su primer disco.

Se destacan sus letras, también compuestas en pandemia y la ponen en ese grupo de cantantes como Hanna Juanita, Sierra Ferrell, Sarah Shook las cuales usan su música como una declaración de principios ante la violencia patriarcal.

11,-John R. Miller – Heat Comes Down: Mucho se dice que tal artista o tal género musical es el nuevo punk, pues bien, sin decir mucho, John R. Miller podría entrar en la categoría Punk si vemos su trayectoria y su intento de mantenerse lo más alejado posible de la industria. Para él es más importante montarse en su ecoline e irse de gira que hacer entrevistas promocionales, tocar en pequeños bares que ser cabeza de cartel en festivales “importantes”, es pues un outcast, un marginado por decisión propia y eso hace que sus canciones vayan directo a la cabeza de quienes las escuchan, sin poder evitar que te dejen algo, atacan a tu conciencia directamente. Es un cercano a Blaze Foley.

“Heat Comes Down” a diferencia de sus discos anteriores es mucho más complejo musicalmente hablando, se nota que ha crecido como músico y aunque mantiene su sencillez ya no va directo a los odios, ahora hay que poner un poco más de atención, para descubrir que sigue siendo el mismo, ese cabrón capaz de dejar la música en el momento que el éxito sea incontrolable.

Es Country Alternativo desde el sur, es música para una generación que se mantiene de pie a pesar de todo.

10.-Drayton Farley – Twenty on High: “Keep the Country Music Sad” dice una camiseta que forma parte de la “merch” de Farley, que para él es como una forma de vida y es lo que intenta reflejar en cada una de sus canciones.

Después de dos discos acústicos que grabó en una laptop usando el Garage Band, antes de irse a trabajar a la fábrica de Mercedes Benz, Farley tuvo la oportunidad de que un sello discográfico se fijara en él, apostara y lo firmara, dándole la oportunidad de grabar un disco en estudio, con un productor encargado de darle más cuerpo y una banda que lo acompañara; el resultado es Twenty on High, un disco que no avisa que Farley está por tomar el lugar por el que ha estado trabajando desde hace años y que se lo tiene muy bien merecido.

Con un mayor presupuesto Farley deja libres a sus influencias y lo que para muchos podría ser un error, para él es rendirle un homenaje directo a Jason Isbell (contó con miembros de 400, la banda de Isbell para grabar el disco) o al propio Springsteen y es que si eres de clases obrera no puedes dejarlo fuera, sin embargo, su estilo, su sello se mantiene pues no importa cuán eléctrico sea tu disco, el Country se mantiene triste.

Para cerrar el año, Drayton sacó un EP con cuatro canciones titulado Kudzu Wild, un disco acústico solo para recordarnos de dónde viene y a donde sigue perteneciendo.

…nos vemos en ocho días…fin de la primera parte…

Jorge Tadeo Vargas; activista, escritor, traductor, anarquista, pero sobre todo panadero casero y padre de Ximena. Desde hace años construye una caja de herramientas para sobrevivir.

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